Desde que tengo turno de noche apenas coincidimos en casa. Cuando yo llego ella sale. Por la tarde, los días que toca pasar por el programa de lavado, a veces nos cruzamos entre la espuma, la cera, el agua a presión, o el flujo de aire para el secado.
Entonces nos guiñamos los faros sin que nadie nos vea. Es nuestro cruce de amor cómplice. Cada vez resulta más complicado ser un coche de policía enamorado.
Entonces nos guiñamos los faros sin que nadie nos vea. Es nuestro cruce de amor cómplice. Cada vez resulta más complicado ser un coche de policía enamorado.
Escrito el 13 de febrero de 2011
2 respuestas a “DE POLIS”
Genial..genial!! me ha encantado!! Qué original!! Te dejo un guiño de mi intermitente..
Me encanta que te encanta. Si vieras que mi intermitente derecho se ha rebelado y va al doble de velocidad…
Gracias, guapa.
Bicos.