Con la falda algo arrugada salió mi vieja vecina de su casa. Con cada paso que daba, sus huesos crujían tristemente. Solo la mancha de mermelada de frambuesa, ponía una nota de color en su semblante. Iba a la piscina, como cada mañana, a nadar durante una hora. El gato negro se cruzó en su camino de nuevo. Lo recogió del suelo, le acarició el lomo y vio en el espejo retrovisor de un coche mi enfado reflejado. El afilado zumbido de la guadaña le permitía vestir mal, nadar cotra corriente, llevar una mancha en la cara y tentar a la suerte. Durante un segundo la envidié.
Escritoel 24 de marzo de 2011 por Cris Barra (Cristina Calduch, Bárbara García y Raquel Romero).
10 respuestas a “ARRUGAS”
Hola Raquel,
«Cris Barra» , esa pluma a tres, está produciendo textos muy buenos!.
Os felicito.
Un abrazo.
Gracias, Bypils, en nombre de todas. Lo mejor es que las componentes no son las mismas. Creo que, hasta ahora, las únicas fijas somos Cristina y yo, Berta ha estado en todos menos en el último, y las demás (Coque, Dominique y Bárbara) en una ocasión.
Me alegra que te gusten los textos que producen las mezclas, aunque te aseguro que lo más divertido es hacerlos.
Otro abrazo para ti.
¡Otra coincidencia! Yo también he hablado de arrugas. Esto está empezando a convertirse en algo habitual. De hecho, mi personaje y el tuyo podrían ser el mismo, incluso por el mal vestir.
¡Qué curioso!
Nota: hoy me despido como los Teletubbies.
¡Abrazo fuerte!
Alan, voy a terminar creyendo en cosas que no creo como esto siga así. Me pasaré a leerte sin falta. Gracias por cambiar las despedidas.
Besotes.
Lamento la desilusión de la despedida. Ya lo he arreglado.
Yo sigo erre que erre.
🙂
Llego a tu blog desde el de Alan. me gusto este relato breve, el cruce de sentimientos entre la narradora y la anciana que se siente liberada de las normas que evidentemente la coartan. Un saludo
¡Bienvenida, Concha! Gracias por pasarte y comentar. Yo te descubrí a ti hace tiempo, gracias al blog de Pipermenta. Leí cosas tuyas que me gustaron mucho. Por aquel entonces era más novata aún, y no te comenté. Prometo volverme a pasar y dejar mi huella. Otro saludo para ti.
un buen trabajo amigas mías… y que cierto debe de ser eso, que el no tener nada que perder te permite vivir más relajado…
Gracias, Domi. Relajado y triste. Besines.