Sopla con fuerza recordándonos que no somos más que lágrimas del continente africano.
Aplastados por la nube del desierto, casi olvidamos la nitidez de un cielo mecido sin tregua por los Alisios. Balsas a la deriva entre continentes, eso somos.
Lugar estratégico. Amenaza soterrada de guerras vecinas. Aviones armados semiocultos por la niebla sahariana.
La calima nos recuerda nuestro origen. Murmullo entre jaimas. Tierra que oculta la voz de las estrellas.
En el fondo solo somos un cóctel de distintas latitudes.